Antes que nada era solo para decir "paso por acá camino a Rumania", y no tenía muchas expectativas. Solo que estuviera lindo para poder visitar todo lo posible, ver el Louvre y visitar a Quasimodo.
Hay 3 aeropuertos internacionales en Paris, el De Gaulle el más grande y conocido, Orly adonde aterrice desde Barcelona y el Beauvais el mas chiquito que es donde partí para Rumania, y donde empecé a escribir esto, ahora transcribo, y me hizo acordar mucho al de Córdoba cuando la sala de embarque internacional era chiquita.
Al llegar a orly te tomas y bus a una central de trenes, Denfert Rochereau y de ahí en tren a Gare du Nord, que salgo al lado del hotel. Los nombres los habia estudiado, el de la parada del metro, tenia que ver el mapa continuamente.
Y como nunca salís por la puerta que analizaste, tuve que dar un par de vueltas con los bolsos a cuestas pero llegue perfecto al hotel y sin preguntar. Solo cansado porque no había dormido nada en la noche anterior.
Ya cuando estaba instalado en mi habitación, miro por la ventana y llovía y la temperatura era de 7º. Una alegría.
Les comente que la primera impresión no fue de agrado, y se pusieron como locos. Imagínate vas en un pasillo de cambio de andenes en una estación de trenes que no conoces, mirando para todos los lados para conocer lo más posible, y te aparecen de frente tres soldados armados, como si fuera en una película, julepe y medio. Ellos no me dieron ni bola, pero también los vi debajo de la torre, entre la gente con los fusiles listo para disparar. Abajo de los puentes donde pasa el tren unos tipos usandolo de baño, no es para promocionar eso.
Analice los movimientos, posibles en ese clima, y lo único que podía hacer bajo techo era visitar el Louvre. Ya que al lado del hotel tenía el metro (todo fríamente calculado) tenía el mapa de las distintas líneas, todo fríamente calculado, menos la cantidad de escaleras que hay que utilizar para cambiar de líneas. Asumo unos 3 millones de escalones, y ya les contare la mejor escalera.
Encamine hacia el Arco de Triunfo, llegando por el metro, tiene como 9 salidas a la calle, ya que a esa plaza llegan un montón de avenidas, bulevares, o rues. Cruce la calle como me enseño Santiago, por debajo, ya que así se llega a un arco mediante un caño. Era imposible estar ahí, entre el viento y la lluvia no se podía estar, espere un rato busque la otra salida y estaba igual y como la cosa no mejoro, me fui al Louvre, que se llega por el metro y antes del museo hay un shopping que estaba lleno y había que cruzarlo entero.
Pague el audio guía, porque el francés no es mi fuerte, pero solo podía hasta las 5 de la tarde, así que a esa hora salí a devolverlo para recuperar el documento, encima ya eran pasadas las 2 y salí casi a las 8.
Es básicamente genial, y al tener de todo lo hace perfecto, y no tiene desperdicio. Moni metete en otro crédito pero tenes que venir a ver todo esto que te ayudara para dar clases je. Todo tiene un aura mística, pero es tan grande que lleva demasiado tiempo y es fácil perderse cosas o no prestarle atención suficiente a los relatos. No soy quien para hablar de las obras, el merito de estar ahí es la misma historia.
Aunque si tuviera que elegir, tengo que ser sincero que la Monalisa es totalmente cautivante a más no poder, uno sin saber se pone a mirarla con atención, fíjense que las manos son desproporcionadas. Pero donde es un derroche de buen gusto y francés total, es en los salones del pequeño gigante, don Napoleón (aunque nunca vivió ahí)
que miradita
Salones de Napoleon
El segundo día pinto igual de feo, y no quedo otra que salir igualmente, donde el único objetivo era Notre Dame.
Baje o subí, no se cual sería la expresión exacta, en el arco de triunfo y pude sacarle fotos, es mas en la primera salió una columna de fierro, que la vi varias veces. Una vez visitado y hartado del arco, no pensé subir a ver desde arriba, eran casi €10. Y aparte con el vientazo que corría, no iba a estar fácil.
el Arco como lo veia el Piojo Lopez
Me voy
al Louvre caminando, en la avenida hay muchas casas de ropa cheta, que al entrar te
atendía un chico de frac y ...., pero eso es para las mujeres, y yo seguí de largo.
En una
esquina me encontré con varios monumentos y en especial, de don Charles de
Gaulle (siempre esta caminando, como el wisky) y al final lejos se veía una cúpula dorada, así que cambie el rumbo hacia las 3. Ok, doble a la derecha, muchas cosas bonitas para llegar ahí, pasando por el
puente sobre el Sena, el Alexander III y llegue hasta este edificio que es el
museo de armas. Este ya esta agendado para el próximo viaje a Paris, llegue a
entrar en el patio que es todo de adoquines, lleno de cañones y también una
tanqueta que se uso creo que en la primer guerra mundial (antes eran guerra
regionales y luego se hizo el campeonato). Arriba de todos el monumento a
Chapatin.
que lindo muchacho
Al salir de ahí, a la izquierda la mole de hierro y a la derecha unas cúpulas góticas, ni dude. Me fui a la iglesia, la Basílica de Santa Clotilde y como toda cosa gótica, muy linda, pero entre una camioneta que me tapaba la entrada y un velorio que había adentro, solo saque fotos de afuera.
Mientras llegaba a la torre que solo estaba garuando levemente, así que pude sacar un poco de fotos. Ni a palos ponerme a subir, había cola para ir arriba en todas las patas de la torre. Para los que no estuvieron en Paris, les cuento que en cada pata sube un ascensor, y no sé si en todas, 2 seguro y el resto podía ser a pie. Pero había muchas excursiones y no quería perder el tiempo.
No lo tenía a mano al cuñado para que me dijiera si los perfiles utilizados estaban bien o mal si la cantidad de remaches era la correcta. Creo que su magia es el tamaño que tiene y donde está emplazada haciéndola deslumbrante.
Me
queda Notre Dame y la verdad estaba ansioso por demás, “me mojo pero voy” y así
fue, fui y me moje.
No van
de la mano por acá en estos momentos el viento y la lluvia, termina uno y
empieza el otro, cuando tenias vientito estaba mejor, pero te empezaba a pegar
la lluvia y a meterte debajo de algo.
No es
impresionante por lo grande, pero te llega esa iglesia, me puse a hacer fila
para entrar. Adentro y no se pagaba entrada, pero decía no cámara, cuando vi que
todo el mundo sacaba foto, recién ahí empecé yo. Pero había gente rezando así
que sin flash.
Adentro
tiene toda la mística, sola te va llevando a sentir en la piel la música gregoriana.
Alrededor
de la nave central, todas las capillas que tienen lo que más se destaca es el
vitreaux más que nada los colores y la elaboración. Se va siguiendo un camino
en el suelo, el único gil que lo seguía, el Argentino, los japoneses de culto tendrán
mucho, de historia también pero en una iglesia son para tirarle otra bomba. En
ese seguir del caminito, hay una entrada, pagas para ver los tesoros de Notre
Dame y me mande, tesoros de verdad, digno de enloquecer a un pirata, cruces,
copones, relicarios, coronas todo de oro, plata y piedras preciosas. Je ahí justo
me entere que para subir a la torre decía afuera. Se podía subir, hupiiii, y me
entro la desesperación por ir, pero si estaba lloviendo no iría.
uno de los tesoros
Así que
ya que estaba adentro aproveche para hablar con el Tata, y le dije, tenemos relación
tu a tú con él, el moverá montañas pero yo puedo destruirlas más rápido. Y como
parece que solo me hace caso en las catedrales, que estén en las capitales del país
(por eso Dios atiende solo en Buenos Aires) “arréglame el tema de las nubes que
quiero subir a visitar a Quasimodo”, también le dije “deja de ayudar al come
gato”, esto se que lo cumplió, se termino la mentira del Barcelona. Y me fui.
Al
salir, llovía? No! Ventizca? No! “yo tengo el poder!!!” y me fui a hacer la
fila para subir, y me tuve que comer como una hora la espera.Hablando de los japoneses, especialmente los grupos de mujeres, como se van robando lugares en la fila. Se pone una al lado tuyo y viene a charlar otra y así van haciendo como un círculo que se va adelantando y como hablan a los gritos, no sabes que pasa y cuando ya están cerca llaman al contingente y se te colaron como 40.
Cuando entramos, teníamos que subir al primer piso, para pagar el ticket, y yo era uno de los últimos. Cuando me di que era una escalera caracol, me freno un poco, pero estaba con demasiadas ganas. Desde ese punto al primer mirador, subí casi corriendo, y fui el ultimo en sacar el ticket, porque le compraba una postal a los viejos, luego iba pasando a todos en la subida, tanto que llegue tercero, y como decimo quinto llegaron los pulmones. Alguien sabe cuántos escalones son? Girando, girando y con la patona mía era casi seguro que le iba a errar a algún escalón y los apilaría a todos abajo. Fácilmente deben ser 10 vueltas que se dan sentia si el mareo.
De ahí se
ve genial, es bastante llano por decirlo así a Paris, se divisa todo y están las
gárgolas que están mirando hacia la plaza como observando la gente.
Gargola mirando el Sena
Hay una
puerta minúscula donde se pasa a la campana mayor, la de Quasi, me pase la
valla de seguridad y quería tocar el badajo, pero se enojo el guardia (no sé
porque) y me quería boxear. Por lo que entendí sin saber francés, a esa campana
la accionaban entre varios hombres, pero Quasi lo que hacía era saltar sobre la
campana y hacerla balancear hasta que empezaba a sonar. Ah todo sostenido sobre
vigas de madera.
Campana mayor
Mientras esperábamos para que nos dejaran pasar y que venga el
siguiente grupo, sacábamos algunas fotos mas. Pero al abrirnos las puertas aparecieron
dos escaleras caracol nuevas, y estábamos en la otra torre, una bajaba y era
grande como la que ya había subido, y una más angostita pero para arriba, que se me complico
pero también subí casi corriendo. Otra vez el aire no subió tan rápido, pero al
salir, ya te das por satisfecho, la vista mejora 100% y se ve todo. Es
maravilloso desde ahí, súper.
Vista desde Notre Dame
Muchas
fotos, disfrutar, mirar etc. etc. pero había que bajar, vieron el ruido del
titanic cuando se quebró? Pues así iba con las rodillas cuesta abajo corriendo,
y como no duele que haga todo el ruido que quiera, baje los quichicientos
escalones y salí caminando. A las 3 cuadras me dio nostalgia y me volví, y me senté
a mirarla desde afuera, un buen rato mientras una señora alimenta a las palomas
y se las coloca en la cabeza a los turistas.
Pense "si me doy un baño tal vez pueda volver a sacar fotos a la noche al arco y la torre". Iluso, me bañe me acomode en la cama 5 minutos y en 5 minutos llego media noche, que bronca que no avisen esas cosas solo suceden en Paris.
Así que
cene y me fui a dormir porque partía a Rumania a visitar a Catalina y Don Dracula. Pero es otra entrega.
Hugh !!! Qué buenas tus historias !!! Espero ansiosa cada nueva edición ;) No sabés lo feliz que me hace (Y LA ENVIDIA QUE ME DA !!!!) el que estés disfrutando tanto de ese ansiado viaje... (sigo esperando una foto en la que se muestre que sos vos el que viajó y no son fotos bajas de Internet :P ) Éxitos en la casa de Don Drácula y ojo con la chiquita !!! jajaja Cuidate!" Besotes.
ResponderEliminarGenial HUGUITO!!!! veo que Cuasimodo estaba de paro??? no lo encontraste haciendo su trabajo de campanero?? jaja
ResponderEliminarImagino la agilidad que has adquirido subiendo y bajando escaleras en Paris y España... Ojo con Don Drácula que anda buscando sangre fresca.Besosss y abrazos desde Villaguay
Excelente relato!! Gracias por compartirlo.
ResponderEliminarUn beso y seguí disfrutando!! Y dejandonos disfrutar con vos:)
Hugui: que regalo me hiciste, solo me falta el relato de Drácula y estamos completos. Me alegro que hayas podido disfrutar de esos hermosos lugares creados por el hombre
ResponderEliminarBEsos desde villaguay
Qué bellos lugares!! Cuando llegues sale un par de zapatillas :P, te estás caminando todo.... me alegro que así sea, aprovechá para conocer y actualizá los nuevos destinos ;)
ResponderEliminarUn beso Huguis !!!